martes, 27 de octubre de 2015

EL UNIVERSO EN SANTANDER (28 de octubre de 2015)


El Diario Montañés, 28 de octubre de 2015


La grandeza de Bilbao sólo cabe en un mapamundi. Abarcar la de Santander precisa de una cartografía planetaria, porque la ciudad contiene tal compendio de proyectos estrella que aprehender su infinitud nos obliga a utilizar terminología interespacial.
Los santanderinos –ciudadanos de edad avanzada, dueños de su ocio– suelen iniciar el día con un paseo que traza una espiral con punto de partida en la Alameda de Oviedo. Continúan por la Alameda Primera, dejando a la izquierda el agujero negro que se tragó el anillo cultural que se había proyectado en torno al planeta de la biblioteca de don Marcelino. Llegan poco después hasta el segundo anillo, en formación desde hace años, también llamado milla, integrado por una estrella que luce a medias, pendiente de una expansión anunciada (el Museo de Prehistoria); por otra intermitente, que deja de alumbrar largas temporadas por razones desconocidas (el Centro Botín); y por una supernova de la que sólo conocemos su reflejo lejano (el Archivo Lafuente).
Luego, de lleno ya en el Paseo Pereda, nuestros paseantes van pensando, antes de emprender el regreso a la Alameda para cerrar la elíptica, en la posibilidad del reposo contemplativo en algún banco frente a la bahía, nuestra particular Vía Láctea, concentración de toda la belleza del universo. Sentados allí, hablan y no paran de ese nuevo acelerador que llaman turbo rotonda, lo último en tecnología vial de la ‘smart city’.
Mi amigo Manolo regresaba a casa el pasado domingo y encaró la turbo rotonda a las tres de la madrugada. Cuando salió de ella, eran las dos. Entonces decidió volver sobre sus pasos para aprovechar el tiempo que le regalaba el cambio horario del otoño. Pero no acabó en el Sardinero, como pretendía. Los caminos inescrutables del acelerador vehicular le dirigieron hacia Monte. Allí permaneció, en soliloquio de juramentos, contemplando la inmensidad de la bóveda celeste hasta que vino a rescatarle la luz incipiente del alba. Eso que ganó, porque si la policía interestelar le llega a haber controlado el soplo, seguro que habría perdido unos cuantos puntos del carnet de conducir.

martes, 20 de octubre de 2015

LA QUIERO LARGA (21 de octubre de 2015)

El Diario Montañés, 21 de octubre de 2015


En Cantabria no hay ninguna piscina cubierta de 50 metros. Pese a ello, Santander obtuvo en 2014 el título de Ciudad Europea del Deporte, entre otros méritos por la categoría de sus instalaciones. Dos años antes –desde un despacho de esos que llamo de saltalaliebre porque es donde menos se piensa–, un iluminado tuvo la idea de rellenar con hormigón la mitad de la piscina descubierta del Complejo Municipal de La Albericia para dejarla en 25 metros. De ese modo ahorraban en mantenimiento y las familias la podían utilizar para recreo. De nada sirvió que al ideólogo del recorte le dijeran que para tal fin la ciudad ya tenía muchos kilómetros de playa. De nada que le recordaran que la otra piscina municipal de 50 metros –ésta, sí, cubierta– está en manos privadas por una concesión y es imposible practicar en ella la natación competitiva.
El asunto está así. Y así parece que va a seguir, porque la crisis económica no aconseja, dicen, gastar el dinero en hacer piscinas. Lo malo es que el cuerpo técnico de la Federación Española de Natación ha intentado en dos ocasiones –la primera en 2013 y la última la pasada semana– que las marcas obtenidas en piscina corta no sean válidas para competir en los campeonatos de España de piscina larga, que son casi todos. Las dos veces, tras muchas negociaciones y duras batallas dialécticas, hemos logrado parar el golpe en la Asamblea General entre la Federación Cántabra y yo (soy asambleísta en representación del CN Camargo). Pero cada vez nos resulta más difícil, porque los técnicos no cejan en su empeño.
Las ilusiones de mil doscientos nadadores cántabros penden de un hilo. En su nombre, pido que de una vez por todas los responsables del deporte regional abordemos este problema con rigor, sin ideas partidistas, porque en Cantabria necesitamos imperiosamente una piscina larga. A ser posible en la capital, cerca de los institutos y de las universidades. Así luciría con más razón el título de Ciudad Europea del Deporte.

martes, 13 de octubre de 2015

ESTRESADOS (14 de octubre de 2015)


El Diario Montañés, 14 de octubre de 2015

Necesitábamos como el comer este puente para sacudirnos el estrés. El día a día, con su actividad frenética, nos mantiene con un nivel de tensión que precisa de estos descansos programados para que la salud siga aguantando. Porque no es saludable que se rompa la cuerda que nos mantiene cuerdos, como al parecer le ocurrió a nuestro paisano, ése que rotuló en la catedral de León una frase vitoreando a las putas vírgenes y a las vírgenes putas.
Y es que hay que tener mucho control para no estresarse cuando la vida te pone en situaciones difíciles. Porque está demostrado que hasta los tiburones se ponen nerviosos. La musola que nació en septiembre en el acuario del Museo Marítimo todavía no se ha podido juntar con su madre porque está estresada. Y Rodrigo Rato, el escualo económico blanco que desde Bankia devoró un banco de miles de pequeños ahorradores y tiene un futuro tan negro como su dinero, también está nervioso porque siente que el arpón de la justicia le ha clavado y no tiene muchas posibilidades de escapatoria. Su estrés es muy comprensible.
Y no le anda muy lejos en esto de los nervios Eva Díaz Tezanos, en su caso porque no para. Primero cuando tuvo que rectificar a Pedro Sánchez, que había dicho que si llegaba a presidente traería el AVE a Santander capital (expresión típica de quien no distingue bien que Santander ya no es provincia). Y ahora, según parece, tampoco va a tener muchas oportunidades de descansar porque el PRC le está regalando el poder que las urnas le negó, y va a representar a Cantabria en el Comité Europeo de las Regiones. Que no es moco de pavo.
Por eso un puente nos viene muy bien a todos. Aunque los que viven los lunes al sol, que tienen puente perpetuo, temen que el gobierno les cobre pronto el aprovechamiento de ese recurso energético, conscientes como son de que los ministros del ramo antes de enchufarse en el retiro dorado de una empresa eléctrica pueden hacernos pagar el peaje como favor anticipado.

martes, 6 de octubre de 2015

EL FACTOR HUMANO (7 de octubre de 2015)


El Diario Montañés, 7 de octubre de 2015

Andamos muy preocupados con la apertura del nuevo hospital de Valdecilla, porque tenemos la experiencia de que en nuestra región algunos asuntos importantes suelen enquistarse. Se terminaba el mes de marzo, que era el plazo que la ley electoral permitía para cortar cintas, cuando Rajoy y Diego lo inauguraban virtualmente. Según manifestó entonces Diego, Valdecilla iba a estar terminado el 15 de mayo, lo pagaría el Estado y nuestra sanidad seguiría siendo pública, universal, gratuita y de excelencia. «Nadie tiene ninguna duda –añadió–, ni siquiera aquellos que tratan de sembrarlas con mentiras y manipulaciones». Hubo muchas fotos dentro de unas habitaciones que, ahora lo sabemos, sólo estaban preparadas para el evento. Esa fue la primera manipulación.
Atrás quedó mayo con sus flores bellas, y ya ha entrado octubre, con fuertes suradas. Y seguimos esperando que se corrija algunas goteras, que se racionalice la ubicación de los profesionales en las plantas y que se obtenga la licencia de apertura por parte del ayuntamiento de Santander. Un poco de todo parece que está influyendo en el retraso. Pero el problema de fondo es que el sistema sanitario se ha desangrado con tanto recorte. El mismo mes en que los dos presidentes inauguraban en futuro, conocíamos el Informe Anual del Sistema Nacional de Salud que recogía que el presupuesto para sostener hospitales y centros de salud había caído de 2009 a 2013 en diez mil millones de euros. Y la caída había repercutido sobre todo en los recursos humanos. Ya apenas se cubren las bajas y no se sustituye a los que se jubilan. El Sistema Nacional de Salud ha perdido en ese periodo en toda España cerca de cinco mil trabajadores.
Esta semana la asociación de Médicos Sustitutos de Atención Primaria de Cantabria ha corroborado la situación: «Durante determinados periodos del año no se cubren las solicitudes de vacaciones, ni las bajas laborales de los centros de salud y los consultorios», lo que está llevando a nuestros jóvenes profesionales a emigrar a otros lugares que les ofrecen mejores condiciones laborales.
Y, qué quieren que les diga, por muy moderno que sea el edificio y muy sofisticada su tecnología, es imposible que Valdecilla se mantenga como un referente si continuamos despreciando el capital humano. Perder a tantos jóvenes preparados es una irresponsabilidad de insensatos. Intentar recuperarlos tiene que ser una de las tareas prioritarias de este gobierno.