martes, 2 de febrero de 2021

PELIGROS Y PARADOJAS (3 de febrero de 2021)


 El Diario Montañés, 3 de febrero de 2021

La esperanza es lo último que se pierde. Quizá por eso el consejero Miguel Rodríguez mantiene la de abrir nuestras fronteras en Semana Santa, si para esa fecha se ha vacunado a «gran parte» de los mayores de edad de la región, que, según él, serían, «por ejemplo, todos los mayores de 80 años». Tal expectativa cojea bastante en cuanto a seguridad de la población general porque, sin entrar en consideraciones más profundas, hay informes que dejan a las claras que esta tercera ola ha rebajado la edad del peligro y está triplicando la mortalidad entre los afectados de la horquilla de 60-69 años. El anuncio tiene doble vertiente: por la parte positiva, mantiene en alto las espadas de la ilusión del sector turístico, en general, y la petición del obispo de Santander, en particular, a quien le parecen desproporcionadas las restricciones de aforo que le han impuesto a sus feligreses en las iglesias; la negativa es que puede venirnos una ola final que arrase definitivamente con todo. El tiempo dictará sentencia.

Lo único que puedo decir es que cuando me enteré, se me detuvo la respiración, precisamente en el momento en que la estaba practicando nasal, pausada y profunda, porque he leído en este periódico que hacerlo de tal guisa resulta «tan eficaz para la sexualidad, como la viagra para la disfunción eréctil», y era cosa de probarla para mantener elevada la moral.

Quienes han estudiado aspectos tan sesudos (he tenido la tentación de escribir ‘sexudos’) creen que el mejor estado se alcanza con mantras o rezos como el avemaría y el rosario, porque tienen el ritmo perfecto para generar la oxigenación corporal idónea. Si es así, puede resultar que los que menos viagra necesiten son quienes persiguen la pureza religiosa. Por bien capacitados, respiratoriamente hablando.

Mira por dónde.

No hay comentarios:

Publicar un comentario